Por:
Mauricio Lozano Peña
Hay
situaciones que a veces son difíciles de comprender y como dicen los viejos y
conocidos adagios populares “A veces pagan justos por pecadores”, eso parece
ser, lo que le está sucediendo al actual
Secretario de Prensa del Departamento del Meta, Winston González del Rio; excelente profesional, oriundo de esta tierra llanera, a quien, los que podemos calificarlo,
nos quedaríamos cortos al decir, que es un servidor idóneo y visionario para el cargo que desempeña; en donde no ha escatimado
en poner al servicio del Departamento,
toda su demostrada gran capacidad
profesional, su dinamismo y talento para el desarrollo de un arduo trabajo en equipo, y que su función demanda; pues la Secretaría de
Comunicaciones, exige en quien la desempeña, experiencia suficiente para solventar las diferentes
estrategias, planes y desafíos que en el ámbito de las comunicaciones, deben ponerse en sintonía con
la Gestión Administrativa del Departamento, en los tiempos que nos encontramos
viviendo; y que WINSTON GONZALEZ DEL RIO en los escasos
cinco meses que lleva en el cargo, ha demostrado
con creces; y muy a pesar de las
dificultades que se afrontan hoy por hoy, el logro de un importante posicionamiento
y mejoramiento de la imagen de nuestro Departamento en el país.
Sin
embargo, aunque vale la pena reconocer y elogiar el ánimo de la Asamblea por
ejercer el control político; también
vale recordar que no se debe perder de vista que en
su actividad siempre deben estos dignatarios de la función pública, buscar
consensos, anteponer el interés público a los egos; todo en aras del bien común. Y así también al señor
Gobernador, como un hombre inteligente y
sagaz que hemos podido percibir que es; detenerse a meditar, si conviene, poner
en medio de dos fuegos, a un funcionario de la talla de GONZALEZ DEL RIO; cuando bien podría, adoptar una postura más humilde y más
propositiva frente a la labor de la DUMA DEPARTAMENTAL; que permita que por el
contrario, de asumirlo como una oposición obstructiva, consiga verla y enfocarla
más bien, como un impulso para el logro de los cometidos propuestos en su plan
de gobierno; y así unos y otros, tengan
consenso en que, por el bien del Departamento,
a GONZALEZ DEL RIO HAY QUE DEJARLO
TRABAJAR!